Fecha: 17/06/2020.
El detector de fugas de aire y la cámara acústica industrial Fluke ii900 permiten un gran ahorro energético. El aire comprimido, el gas, el vapor o el vacío no solo son extremadamente caros, sino también una de las mayores fuentes de desperdicio de energía en la industria. Una sola fuga de 3 mm puede suponer un gasto de hasta 6.000 € al año.
La cámara acústica industrial Fluke ii900 ha sido especialmente diseñada para plantas de producción que utilizan aire comprimido. Pero, ¿qué la diferencia de los detectores de fugas convencionales?
Características principales:
- Detección de fugas precisa: Sus 64 micrófonos direccionales detectan las ondas sonoras emitidas por la fuga. Se superponen sobre una imagen para mostrar su ubicación exacta
- Proteja a los miembros de su equipo: Detecte fugas situadas incluso a 50 m para localizarlas en el momento en que se producen y garantizar la seguridad de su equipo durante la inspección de zonas peligrosas
- No espere a que se produzcan paradas planificadas: Sus rangos de frecuencia regulables entre 2 y 52 kHz filtran los ruidos audibles para que pueda realizar inspecciones durante las horas de funcionamiento habituales
- Para todos y en cualquier momento: Muy fácil de usar, incluso por personal no especializado
Si desea evitar paradas imprevistas, no correr riesgos de seguridad, contribuir a la reducción de las emisiones contaminantes, mejorar su eficiencia energética y reducir los costes de la energía en su empresa, vea este vídeo de demostración gratuita de la Fluke ii900.