Fecha: 26/08/2022.
Atravesando el ecuador de la década de los 2000 algunos fabricantes de semiconductores de prestigio declararon que en los siguientes años, empezarían a comercializar diodos emisores de luz de gran potencia, alta eficacia luminosa y que a su vez dispondrían de una elevada esperanza de vida.
Este salto tecnológico supuso el comienzo de una actividad frenética en el departamento de I+D de Daisalux que permitió cambiar las formas y las proporciones de los nuevos desarrollos de luminarias, debido a la drástica reducción del tamaño de la fuente de luz, ya que se pasó de un tubo fluorescente a uno o varios leds.
Se consiguió diseñar luminarias de emergencia más pequeñas, con otras proporciones, más discretas y que facilitaban la integración en el espacio. Por otro lado, se lograba reducir el consumo de la luminaria y ahorrar en costes de mantenimiento.
Sin embargo, a pesar de ser unas lámparas más eficientes y duraderas, no se disponía de una fotometría adecuada a los requisitos exigidos en la iluminación de emergencia. Ante la apertura de este campo en el que investigar con un gran margen de mejora, Daisalux creó un Departamento de Óptica Aplicada que en los últimos 15 años ha pasado a ser una de las piezas angulares sobre la que pivota el desarrollo de sus productos.
Evolución de las ópticas
Una mirada retrospectiva muestra que el diseño y el uso de las ópticas han tenido un papel fundamental en el desarrollo de los productos Daisalux en la última década.
Se puede decir que la aventura de Daisalux comenzó en el 2010 con el lanzamiento de la Serie Lens. Las primeras luminarias de emergencia que incorporaban en su conjunto óptico, un led y una lente. Desde entonces, el Departamento de Óptica de Daixalux no ha cesado en su empeño por desarrollar ópticas más eficaces, eficientes y compactas.
En un principio, la Serie Lens incorporaba 3 ópticas diferentes, cada una de ellas para un rango de alturas determinado. Sin embargo, para colocar esta luminaria en la pared y aprovechar todo su flujo luminoso, fue necesario incorporar una cuarta lente. Lo que derivo en el nacimiento de la Serie Lens Pared. Para su desarrollo hubo esperar hasta el 2012.
Seguidamente, en 2013, tuvo lugar el lanzamiento de la Serie Izar. Ella supuso la aparición de la primera luminaria en incorporar diferentes lentes según la superficie a iluminar. Una denominada Antipánico y otra con una curva más elongada, diseñada para cubrir recorridos de evacuación.
Casi al mismo tiempo, se desarrolló la Serie Block, una luminaria para la colocación en pared en superficie. La curva fotométrica de este aparato está optimizada para proyectar la luz desde el plano vertical gracias a un conjunto óptico formado principalmente por un led junto con un reflector.
La Serie Atria, aparecida en 2016, se compone de un conjunto de proyectores diseñados para grandes alturas y superficies que disponen de una combinación de lentes y un reflector aluminizado para una distribución óptima de la luz tanto para la iluminación desde el techo como desde pared. En este caso, el reflector consigue orientar los rayos de luz en los ángulos en los que la lente es menos eficaz.
Justo antes de la aparición de la Serie Naos llegó la Serie Ziner. En este caso se desarrollaron unas lentes planas en su parte exterior, combinadas junto con un reflector del mismo color que el producto, que permitían una mejor integración en la arquitectura.
En el desarrollo de la Serie Naos se han utilizado por primera vez las Superficies Microestructuradas. Estas superficies proporcionan unas prestaciones técnicas en línea con la evolución de las anteriores ópticas desarrolladas por Disalux, pero con la ventaja de su simplicidad, al estar compuestas por un único elemento óptico plano.
Para Daisalux ha sido todo un desafío diseñar y fabricar un elemento óptico de estas características y tamaño.
Como muestra de la complejidad a la que se ha enfrentado el equipo de I+D de Daisalux, sirva de ejemplo la Microestructura usada para recorridos de evacuación de la Serie Naos. A modo de surcos en el relieve de la Microestrutcura, en sus 17 mm de diámetro y 2 mm de espesor, contiene más de 150 pequeñas micro ópticas. Todas juntas, conforman la Superficie Microestructurada.
Cada uno de estos surcos tiene que ser modelado con un ángulo y una longitud exactos para provocar la refracción deseada de cada rayo de luz y obtener la curva fotométrica necesaria para cumplir los requerimientos lumínicos del proyecto de iluminación de emergencia.
Este avance en el conjunto óptico, que antes se componía de varios elementos elementos ahora se reduce a uno. Sin olvidarnos de la reducción en su volumen, que se muestra obvia.
Actualmente, la mejora en su rendimiento y desarrollo de nuevas fotometrías es parte fundamental del trabajo desarrollado en el Departamento de Óptica Aplicada de Daisalux.