Fecha: 07/11/2018.
Los sistemas de cámaras se utilizan para controlar habitaciones, edificios y espacios al aire libre, con el fin de registrar el acceso no autorizado o actividades delictivas. Por lo tanto, la máxima de este sistema es garantizar la alta disponibilidad de la señal CCTV (circuito cerrado de televisión). Dentro del campo de variables que pueden ocasionar daños predecibles, están las tormentas eléctricas. Durante el transcurso de una de ellas, los dispositivos:
• Pueden ser completamente destruidos por un rayo directo.
• Si hay un rayo lejano, pueden dañarse por los voltajes de sobretensión que inducen los cables de transmisión durante la liberación de ondas electromagnéticas.
Dependiendo de la tecnología de la cámara existen diferentes modelos de protección de OBO:
1. Transmisión de video con cable coaxial y conector BNC, además si ésta posee una unidad de control para girar e inclinar la cabeza de la cámara, esta trasmisión se controla mediante una interfaz serie RS485, utilizando un cable de 2 polos como fuente de alimentación.
2. Dependiendo de la versión, las interfaces de datos y videos se ejecutan juntas a través de una conexión RJ45.
3. Las cámaras IP modernas poseen una única conexión RJ45, que transmite tanto la señal de datos como de vídeo y también la fuente de alimentación a través de Power over Ethernet (PoE).
OBO ofrece la protección para todas estas soluciones, ahorrando espacio, tiempo y dinero debido a la instalación de un número menor de equipos a instalar. Eso sí, deben instalarse lo más cerca posible del dispositivo a proteger, permitiendo que el nivel de protección y el riesgo de acoplamiento en el lado protegido se mantengan bajos.