Fecha: 07/10/2024.
Pronutec, fabricante reconocido en el sector del material eléctrico, se especializa en soluciones seguras y eficientes para la distribución de energía. En este análisis, se comparan dos componentes fundamentales en las estaciones de recarga de vehículos eléctricos: las bases portafusibles y los interruptores automáticos. La elección entre uno y otro tiene un impacto significativo en el diseño y operación de las instalaciones eléctricas, y Pronutec presenta argumentos clave que favorecen el uso de bases portafusibles en estas aplicaciones.
Coste
Interruptores automáticos
Los interruptores automáticos, aunque efectivos, son más costosos tanto en su adquisición como en su mantenimiento. Además, requieren una calibración especializada al momento de su puesta en marcha, lo que conlleva un aumento de los costos operativos a largo plazo.
Bases portafusibles
Por otro lado, las bases portafusibles son una opción considerablemente más económica. Ofrecen una solución más asequible sin sacrificar la calidad o el rendimiento en aplicaciones industriales y de distribución eléctrica.
Seguridad frente a cortocircuitos
Interruptores automáticos
Si bien los interruptores automáticos ofrecen una buena protección contra cortocircuitos, tienen una durabilidad limitada. Ante corrientes muy altas, es posible que necesiten ser reemplazados tras varios disparos, lo que reduce su vida útil. Además, su capacidad para soportar cortocircuitos es inferior a la de los fusibles.
Bases portafusibles
En contraste, las bases portafusibles destacan por su alta fiabilidad ante cortocircuitos. Los fusibles poseen un poder de corte mucho mayor, lo que los convierte en una opción extremadamente segura en instalaciones donde la seguridad es primordial.
Seguridad en la maniobra de corte en carga
Interruptores automáticos
La seguridad en la maniobra de corte es uno de los puntos fuertes de los interruptores automáticos, ya que esta es completamente independiente de la intervención humana.
Bases portafusibles
Sin embargo, las bases portafusibles dependen de la habilidad del operario para realizar la maniobra de corte de manera segura. Esto implica que es necesario formar adecuadamente a los trabajadores para garantizar la seguridad en este tipo de instalaciones.
Instalación y diseño del cuadro
Interruptores automáticos
Las dimensiones de los interruptores automáticos no están estandarizadas, lo que dificulta su integración en cuadros eléctricos preexistentes. Por otro lado, esto obliga a diseñar cuadros específicos para cada tipo de interruptor, encareciendo el proceso y limitando la estandarización en las instalaciones.
Bases portafusibles
Las bases portafusibles, al contar con un diseño estandarizado, ofrecen una mayor flexibilidad. Además, sus dimensiones son intercambiables entre diferentes fabricantes, lo que facilita la expansión y actualización de las instalaciones con un diseño modular y escalable.
Aplicación en supercargadores
Desafíos en supercargadores
Los supercargadores, esenciales para la carga rápida de vehículos eléctricos, requieren manejar grandes flujos de corriente. Además, esta carga cíclica intensa puede provocar el desgaste prematuro de los contactos en los interruptores automáticos, reduciendo su efectividad a largo plazo.
Ventajas de las bases portafusibles en supercargadores
Las bases portafusibles, por su parte, son más adecuadas para este tipo de aplicaciones. Al permitir una expansión modular de las líneas de distribución, resultan ideales para instalaciones que se proyectan duplicar su capacidad en un futuro cercano. Esto asegura que la infraestructura esté preparada para un crecimiento sostenido en la demanda de vehículos eléctricos.
Bases Portafusibles VS Interruptores Automáticos
Las bases portafusibles, en comparación con los interruptores automáticos, presentan varias ventajas claras. Ofrecen una mayor seguridad ante cortocircuitos, un coste más bajo y un diseño que facilita la expansión modular de las instalaciones. Estas características las convierten en una solución idónea, especialmente en aplicaciones que requieren un alto poder de corte y la capacidad de expansión, como en las estaciones de recarga de vehículos eléctricos.