Fecha: 16/11/2020.
Algunos fabricantes de cuadros eléctricos evitan invertir en automatización y digitalización. Sin embargo, vale la pena, y más de lo que parece. El mejor ejemplo: Meurer-etechnik. Esta PyME ha aumentado su rendimiento en un 30% junto con la calidad de la producción y, por lo tanto, está preparada para el futuro.
Una nueva ampliación con una sala de producción luminosa, una elegante sala de exposición para la presentación de los productos y proyectos actuales, modernas oficinas y salas de reuniones y, en el centro, sus máquinas. Dietmar Meurer, propietario y director general de Meurer-etechnik , situada en la tranquila comunidad rural de Großmaischeid en la provincia de Neuwied (Alemania), muestra con orgullo sus nuevas adquisiciones: un centro de mecanizado de armarios de distribución y, además, un terminal de ensamblaje de cables totalmente automático. «Cualquiera que venga a nuestra empresa podrá comprobar por sí mismo lo innovadores que somos. Nuestra empresa ha experimentado un gran crecimiento en los últimos años y ahora está adquiriendo velocidad», afirma este entusiasta de 50 años. Tiene muchas razones para estar contento, ya que este emprendedor ha tomado una importante decisión: invertir de forma constante en automatización y digitalización.
Parece plausible que las soluciones integrales, que comprenden desde el software hasta la automatización de la producción en la fabricación de cuadros eléctricos, puedan lograr reducir enormemente los costes. Sin embargo, cuando se trata de invertir específicamente una suma nada desdeñable en tecnología de automatización, por lo general, los fabricantes tradicionales de cuadros eléctricos todavía dudan, ya que las inversiones en torno a los cinco y seis dígitos distan mucho de ser lo normal. «Antes no estábamos acostumbrados a gastar tanto dinero en máquinas», afirma Dietmar Meurer. Sin embargo, él lo ha hecho, a pesar de que, por supuesto, la cuestión de la amortización estaba muy presente. «Los cálculos de este tipo me resultan de poca utilidad. Es mucho más importante tener en cuenta si dentro de tres, cinco o diez años seguiremos siendo competitivos sin la tecnología de automatización moderna, o si seremos capaces de seguir en el mercado». Dietmar Meurer no solo calcula, sino que también lo analiza todo en su conjunto con actitud emprendedora y visión de futuro: «Hay que invertir primero en una máquina si se quiere aprovechar su potencial».
Desde 2016, el centro de mecanizado Perforex BC de Rittal se ocupa del taladrado, fresado y roscado de piezas planas y armarios de forma totalmente automática. Antes, todas las partes del armario de distribución debían dibujarse a mano y luego procesarse mecánicamente con herramientas convencionales. En función del tamaño del sistema, esto implicaba dedicar varias horas de la jornada laboral a la preparación y también requería una ejecución artesanal impecable. La calidad del mecanizado de todos los orificios y cortes no siempre era perfecta. De vez en cuando, había que desechar una parte del armario y empezar de nuevo el trabajo. Ahora, todo esto ha cambiado: Perforex mecaniza cada una de las piezas planas de un armario con la misma precisión y fiabilidad en todos los puntos. Dietmar Meurer sabía que con Perforex llevaría la producción directamente a un nivel superior. Todo empezó con una visita a una feria y una recomendación del equipo de ventas, luego una visita al Rittal Innovation Center en Haiger, y allí surgió la chispa. «La máquina captó de inmediato mi atención. Al fin y al cabo, queremos fomentar la calidad y así mejorar la satisfacción del cliente. Y también aumentar la productividad y la eficiencia en la fabricación».
Fue todo un éxito. «En 2018 pudimos registrar un aumento del 30 % en la producción de armarios de distribución con respecto al año anterior», resume Dietmar Meurer. Y aquí falta incluir, porque no se puede medir directamente en números, lo que hemos ganado en imagen, confianza y lealtad del cliente. «Queremos abastecer a nuestros clientes habituales de la mejor manera posible y, por supuesto, ganar nuevos clientes», afirma Meurer. «Para algunos clientes hemos ganado en atractivo porque ahora podemos entregar cantidades que antes simplemente eran imposibles de asumir. Asimismo debemos ajustarnos a plazos de entrega más cortos. Ahora podemos prometer a algunos clientes un plazo de entrega de dos semanas para los armarios de distribución ya fabricados para pedidos abiertos, algo que antes era totalmente impensable de esta forma. ¡Ahora jugamos en primera división!»
Meurer-etechnik ha reorganizado completamente la ingeniería, la planificación del trabajo y la producción. Ningún componente está aislado, todos los procesos están conectados entre sí como un sistema. Las soluciones integrales también permiten un aumento general de la productividad y la eficiencia en la fabricación del producto. No se trata de una mejora individual por separado en el sentido de un aumento lineal de un aspecto, sino que la interconexión de varias mejoras deriva en un aumento exponencial de la eficiencia general. Esto ha supuesto un importante valor añadido cuantificable, como demuestra Meurer-etechnik: «La adquisición del centro de mecanizado Perforex junto con Eplan fue la decisión correcta, y el aumento cuantificable que se obtuvo en la calidad y la productividad ha allanado el camino para futuras inversiones», afirma el jefe de la empresa.