Fecha: 05/09/2019.
Con la intención de facilitar la labor del departamento de I+D se ha habilitado en las instalaciones de Daisalux una nueva sala con más equipación que la anterior para realizar todos los ensayos necesarios y comprobar la protección IP de todas las luminarias. La protección IP es una calificación estándar desarrollada para medir el nivel de protección contra los materiales externos, como puede ser el agua o el polvo.
Todas las luminarias fabricadas en Daisalux están marcadas con un grado de protección IP. Lo que significa que, en mayor o menor grado, están protegidas contra los efectos del agua y de elementos sólidos.
Como todas las luminarias se comportan de manera diferente, es importante realizar pruebas y conocer en qué medida una luminaria puede soportar la entrada de materiales externos. De esta forma se puede entender y localizar con precisión dónde se encuentran los puntos débiles y llevar a cabo acciones para corregir y mejorar los resultados.
Aunque todas las luminarias de emergencia se podrían certificar en las propias instalaciones de Daisalux, para mayor seguridad, se prefiere hacer uso de un segundo agente. Por lo que, una vez que se han realizado todas las pruebas y se ha logrado la protección deseada, la luminaria se envía a una empresa externa para poder emitir el informe de ensayo. En este caso se envía a la empresa madrileña LCOE donde se emite el certificado correspondiente.
Aparte de la protección que proporciona la envolvente, para mejorar la seguridad del contenido electrónico de las luminarias, Daisalux hace uso de otros dos métodos:
– Barniz aislante: consiste en un tratamiento de los circuitos impresos llamado tropicalizado. Los circuitos son revestidos con una resina acrílica de secado rápido. De esta forma se aumenta la protección de las luminarias aislándolo de la humedad, propiedades muy interesantes en climas húmedos.
– Aislamiento galvánico: sirve para transmitir señales entre las distintas partes funcionales del circuito eléctrico, pero manteniendo las dos partes separadas. Al no haber contacto entre las dos partes las masas se mantienen separadas previniendo el traspaso de carga eléctrica.